Te contamos más cosas sobre la digitalización de cintas de vídeo
La cintas de vídeo que todos conocemos y en cualquier formato, en su momento fueron grabadas, en un vídeo o en una vídeo cámara, de forma analógica en una cinta magnética en la que, gracias al cabezal de vídeo, se ordenaban las partículas magnéticas de una determinada manera para que pudiésemos posteriormente reproducirlas.
Esas cintas de vídeo con el paso del tiempo van perdiendo información, sobre todo si están expuestas a cambios de temperatura, ya sea de frío o calor, humedad, polvo, o al estar situadas cerca de un campo magnético, como el producido por un altavoz o un televisor, especialmente de los antiguos.
Gracias al proceso de digitalización la información analógica contenida en las cintas de vídeo se convierte en digital pudiendo ser almacenada en un soporte como un DVD, disco duro, o pen USB de memoria.